El Grand Palais, construido para la Exposición Universal de 1900, se distingue por su excepcional arquitectura con una nave principal de 240 m de largo rematada por una inmensa vidriera, una bóveda de cañón cerrada con una cúpula sobre pechinas y la fachada con columnas diseñada por el arquitecto Henri Deglane.

El Grand Palais cerró sus puertas en 1993 tras haber sido la sede de numerosas ferias y exposiciones y fue objeto de una intensa campaña de restauración entre 2001 y 2007. Desde entonces, bajo la vidriera más grande de Europa, encontramos una superficie de 15.500 m² en los que se celebran anualmente una cuarentena de acontecimientos sobre todo tipo de expresiones artísticas: pintura, escultura, moda, cine, teatro, fotografía, música, danza… Su salón de honor es uno de los escenarios del teatro de la Comédie Française. El Grand Palais presenta de forma permanente seis exposiciones de envergadura nacional o internacional. Los miércoles se celebran debates y los viernes se proyectan películas. Ferias, competiciones deportivas y desfiles de alta costura tienen también su sitio en la agenda de este espacio gestionado por la entidad Réunion des Musées nationaux-Galeries nationales.